miércoles, 31 de octubre de 2012

Conferencia de Unai Aranzadi


“Los sujetos de mis historias no son simple mercancía,  son personas que sufren”



Unai Aranzadi trabaja en lugares de los que la mayoría lucha por huir. Busca a las víctimas y a sus verdugos y nos hace mirar al abismo de la guerra y la locura humana a través de su trabajo. Al Jazeera, BBC o CNN son algunos de los medios de los que se ha servido para acercarnos visiones de las que muchos prefieren apartar la vista.

En la conferencia ofrecida el  pasado miércoles 24 en la facultad de Ciencias Sociales y la Comunicación, nos demostró el gran cariño que tiene Aranzadi por el periodismo. Fue una charla en la que cada vez que iba pasando el tiempo, Unai transmitía una  ternura y una  admiración impresionante por su trabajo. En esta conferencia este Getxotarra de 37 años nos contó algunos de los escalofriantes ejemplos  que ha vivido en su amplia experiencia en conflictos armados.  Viajes a esos lugares de los que todo  el mundo quiere huir.
Realiza documentales independientes sobre los conflictos internacionales actuales, con el único fin de promover un  cambio social: una  vida mejor en un futuro  mejor para todos.

Para Unai, su trabajo  es narrar y contextualizar  lo que está sucediendo para que los sujetos de esas historias acaben con su infierno de vida y  pare su sufrimiento.

Empezó a ofertar contenidos importantes. Contó historias sobre conflictos en clave de derechos humanos. Siendo la guerra de Irak el empujón definitivo para este periodista. Para Aranzadi, esta guerra le marcó mucho. Fue una experiencia muy dura, en la que perdió compañeros y vivió  situaciones impresionantes, pero que no le desmoralizan, sino le hacen mas fuerte para luchar contra esa injusticia por la que mucha gente inocente está sufriendo todos los días”, contó Unai durante la conferencia con un gesto de emoción en su rostro.

 “Los  sujetos de mis historias no son simple mercancía”, afirmó Aranzadi en la conferencia. Nos explicó que son gente que sufre mucho, son el producto que manejamos pero no desde el punto de vista mercancía, no hay que hacer de esas historias una manipulación;  sino hay  que contar esa historia para  denunciar esa situación, para que se acabe ese sufrimiento.

“Es impresionante como te meten  en su vida, como te están regalando su vida hasta en sus peores momentos, estamos comprometidos con  los protagonistas  de  nuestra historia”, dijo Unai Aranzadi en la conferencia.

También nos habló de los medios de comunicación, nos dijo que los medios no responden a intereses humanitarios, sino a intereses comerciales. Solo  interesa lo que  vende. 

Finalizó la conferencia diciendo que el mejor formato para dar cabida  a la información  que tenemos en este momento son los documentales y los libros. Formatos amplios y arriesgados.




Texto de LAURA IBÁÑEZ PÉREZ


martes, 30 de octubre de 2012

Unai Aranzadi,  Periodista de guerra
“Si es por la historia que quieres contar tienes que tocar las puertas del infierno”

     
      Este periodista especializado en conflictos armados y derechos humanos es un documentalista que ha trabajado a nivel periodístico en diferentes partes del mundo, entre ellas Colombia, África, el Sáhara o Gaza. Es un gran defensor de los medios de comunicación públicos y reniega de la actual prensa sensacionalista. En su discurso, animó a los nuevos profesionales a "no buscar audiencias a base de espectáculos, sino de soluciones" y a no frivolizar los contenidos informativos.  Aprender idiomas viajando es un reto y uno de los consejos que más reitera.  Cuenta que siempre que ha sufrido un fracaso, acto seguido a disfrutado de una victoria, por eso, insistir, resisitir y no dejarse manipular podría ser la solución para estos tiempos inciertos.


      Aranzadi es, sin ninguna duda, toda una institución viviente en el periodismo de guerra. A través de sus cámaras y micrófonos, nos enseña distintos escenarios donde se vive una guerra global con documentales independientes sobre conflictos internacionales realizados con un ángulo periodístico alternativo. Sus palabras son claras, “La base de mi trabajo es narrar lo que sucede para precipitar el cambio, contextualizar los hechos y trabajar para los sujetos en los que baso mi historia”, ya que las grandes instituciones muchas veces tratan de invisibilizar realidades tangibles en diferentes rincones del mundo. Por eso, reconoce que el ver sufrir a tanta gente tiene un coste psicológico alto y que su forma de superarlo es no olvidarlos y hascer justicia denunciando su historia.
      Estas dos horas han sido una gran experiencia para los estudiantes de 4to de periodismo de la UPV escuchar a un maestro en la materia del periodismo más indagador y arriesgado. Un alma independiente que prefiere dirigirse a los “futuros profesionales del país” como un periodista freelance que ha escogido una forma libre de informar.  Al escuchar cada una de sus palabras, vemos en él a  un instructor del buen hacer gracias al interés con el que narra sus vivencias, que es prácticamente hipnotizante.
       Ya sea por iniciativa propia o por trabajo,Aranzadi demuestra estar siempre dispuesto a salir corriendo hacia cualquier lugar en busca de una historia que ayude, como él dice, “a contribuir a que el sufrimiento de su protagonista se detenga y que de alguna forma, pueda ayudar a la mejoría de su entorno”. Al hilo de estas palabras, puntualiza que es muy importante quitarse el estrés de lo inmediato, del estrellato efímero y del entretenimiento. Aunque su trabajo ha sido patrocinado por grandes medios de comunicación como CNN International, BBC World, Al Jazeera English y Canal +, ha rechazado muchas ofertas de trabajo de grandes cadenas televisivas porque van en contra de sus ideales. No le gusta aceptar el poder económico y sus condiciones para que sean ellos quien determine qué debe contar, porque, a su juicio “lo importante no es dónde lo publicas, sino qué publicas".
         Defiende estudiar en la universidad una carrera como periodismo para aprender las bases de la redacción y facilitar la labor informativa. Considera que los periodistas autónomos aunque son especialistas en fracasos,  terminan obtienendo cosas buenas.  Al terminar su conferencia, aconsejó a los estudiantes que hagan lo que su conciencia le exija, que construyan con criterio propio lo que llevan dentro y no con lo que le impongan fuera. También resalta la importancia de consumir menos prensa y leer más literatura, ya que "la actualidad es efímera y así puedes construir tu propio discurso".


                                            



Texto y vídeo editado por: Mónica Andrea Yepes Rivera.





lunes, 29 de octubre de 2012

Conferencia de Unai Aranzadi


“Yo no hablo sobre las cosas terribles, esto solo es un producto de la gente; yo    narro para precipitar el cambio”

Unai Aranzadi  está premiado como uno de los mejores documentalistas, además de ejercer como periodista y fotógrafo. En la conferencia ofrecida el pasado miércoles 24, en la facultad de las Ciencias Sociales y la Comunicación, explicó que él tiene un lema que siempre le acompaña y es que un buen documental no solo proporciona una buena historia, sino también un buen mensaje. Y es, precisamente, este mensaje el que ha hecho que Aranzadi viaje a esos lugares de los que todo el mundo quiere huir. En situaciones bélicas en los que todo se desvanece, este getxotarra busca el lado más humano para acercarnos visiones que muchos prefieren apartar. 

 “El periodismo es uno de los mayores y grandes oficios donde se trabaja con trepas y se reciben todo tipo de puñaladas”, dijo Unai Aranzadi en la conferencia. “Es más. El periodismo está controlado y dirigido únicamente por cínicos”, apuntó provocando así las risas de los atentos estudiantes. Una vez roto el hielo, algo que no le costó ya que se notaba su soltura y amor hacia el periodismo, el escritor y fotoperiodista no dudo en quitarle hierro al asunto  y dar consejos a los alumnos para animarlos en el camino hacia lo que más les gusta: “el periodismo hay que vivirlo y sentirlo. Pero no os preocupéis porque vosotros sois el futuro”, matizó Aranzadi con una amplia sonrisa en la cara.
Unai Aranzadi desde sus inicios tuvo muy claro que el periodismo era lo suyo. Lo llevaba en la sangre. Es por eso que a sus 37 años ya se ha recorrido muchísimos lugares en sus peores situaciones. “Lo que me pegó el empujón definitivo al periodismo y mi especialización –de guerras y recursos humanos- fue la guerra de Irak”, explicó el vasco durante la charla. “Cuando comenzó esta batalla sentí que tenía que mi lugar estaba allí, que no podía quedarme esperar más. Estaba realmente hambriento por colocar historias”, recuerda mientras pierde la mirada en su pasado. Ese fue su verdadero comienzo en este mundo en el que poco tiempo después se le abrió un inmenso mundo antes sus ojos.
Desde entonces no ha parado. Gaza, Somalia, Chechenia, Afganistán, Colombia, Palestina… Todos los lugares tienen su rastro. Muestra de ello son los vídeos que ha grabado y se han publicado en los mejores medios como BBC, CNN y Aljazeera, entre otros. Sin embargo, esto no le ha hecho perder el norte. “Me gusta contar con la ventana de estos grandes medios pero para poder contar lo que yo quiero; mi forma de ver el mundo”, confiesa feliz.
En la actualidad este periodista confiesa haber aprendido a “controlar mejor la ansia” del periodismo, y es que sus prioridades han cambiado con el nacimiento de su hijo. Sin embargo, asegura que “yo ya viví mi época destructiva en la que me apuntaba a todos los lados para vender mi historia”. Independent docs es la sombra de su gran trabajo. El sello de su curriculum. Las luces de su pasión. Allí, en su página web, se pueden ver vídeos que aun le estremecen sobremanera verlos. “El día que fuimos a la inauguración en Colombia acabábamos de enterrar a una niña pequeña y su familia me lo dio todo para que yo venda su historia y pueda ayudarles”, confiesa Aranzadi. “Es entonces cuando me di cuenta que no puedo fallarles y que los periodistas nos debemos a ellos”, concluye.





Texto: Eunate Fernández Domínguez






Conferencia de Unai Aranzadi

Unai Aranzadi, el periodista que trabaja en lugares de los que la mayoría lucha por huir

Su obsesión por narrar lo que sucede para precipitar el cambio es lo que hizo que este vasco se convirtiese en un incómodo periodista de guerra. Gaza, Chechenia, Libia o Irak son sólo algunos de los lugares en los que ha trabajado como documentalista, escritor y fotoperiodista. En su mente siempre un compromiso; el de contribuir a la mejoría del protagonista o víctima de su historia huyendo del sensacionalismo. Quizás por eso, recientemente ha rechazado ofertas de trabajo de grandes cadenas de televisión y ahora apuesta por publicar su trabajo en formatos amplios como libros o documentales. 

Detesta los “grandes titulares” que priman tanto hoy en día en los medios porque son simples “fogonazos de la realidad” que no llevan a nada. Por eso, no es usuario de la red social Twitter porque cree que las historias duras necesitan un desarrollo importante y, como él mismo reconoce, no le gusta entrar en el juego de tener que limitarse a 140 caracteres.

Aranzadi ha trabajado para medios internacionales muy potentes como Al Jazeera, la CNN o la BBC, entre otros. Por eso, está legitimado para criticar a los grandes medios a los que acusa de prepotentes y corporativistas. Aunque parezca un utópico, mantiene los pies en el suelo al reconocer que le gustaría contar con la ventana de la BBC o de la CNN pero para poder contar lo que él quiere; su forma de ver el mundo. Haciendo honor a su fama de crítico, Unai detesta la caverna mediática existente en países como España y aboga por una televisión pública de calidad en la que todos los ciudadanos nos veamos reflejados. Su máxima a este respecto es que “no hay libertad de expresión si no hay igualdad”.


Su “hambre” por colocar historias de conflictos bélicos en clave de derechos humanos ha hecho que Unai tuviese que ver sufrir a mucha gente e incluso ver morir a compañeros a los que espera hacer justicia con la memoria. “Es importante trabajar para que las generaciones futuras puedan ver cómo vivíamos en esta época que nos ha tocado vivir”, afirma Unai.

En su discurso a los alumnos del cuarto curso de Periodismo de la Universidad del País Vasco, este getxotarra de 37 años, recuerda que un día el también fue “principiante” y, por eso, alienta a sus oyentes a que cursen esta carrera que él no terminó. Lamenta no haberlo hecho porque reconoce que le hubiese dotado de más herramientas para facilitarle su trabajo. Sin embargo y, con el paso del tiempo, él consiguió desarrollar su forma de ver el mundo y esto, junto con su sed de contar historias, lo convirtieron en el reconocido escritor que es en la actualidad. Mientras los alumnos le escuchan atentamente, Aranzadi les anima a especializarse en la materia que les apasione ya sea información local y sucesos, conflictos, política, etc. Apuesta porque no hay una especialización periodística mala y les recuerda también lo importante que es caminar con los protagonistas de sus historias. Por último, les aconseja que se quiten el estrés de lo noticiable y que hay otros formatos, como libros o películas, que también son formas de expresión representativas de la realidad. Y es que, en opinión de Aranzadi, el periodismo está excesivamente sobrevalorado. 

Escrito por: Miren Negrete González